miércoles, julio 18, 2007

San Fermín













"Uno de enero, dos de febrero, tres de marzo, cuatro de abril. Cinco de mayo, seis de junio, siete de julio, San Fermín."




La semana pasada, los pamplonicas y muchos "guiris"(extranjeros), entre los cuales me cuento, ya que ni cincuenta años fuera de mi tierra me harían dejar de ser chilena; vivimos la celebración más importante que ocurre en esta pequeña ciudad: los sanfermines. En origen, una fiesta religiosa, dedicada a este patrono que, según la leyenda, fue un mártir, oriundo de Pamplona, que luego de ser condenado a muerte en Tolousse, su cadáver fue arratrado por un toro. Historia trágica, como muchas de las que se cuentan acerca de los primeros cristianos popularizadas con la publicación de La Leyenda Dorada en el siglo XIII. Sin embargo, no existen pruebas concretas de la existencia de San Fermín.




Pero, a los pamploneses, o pamplonicas, como les gusta que les digan; eso les da igual. Además, su fiesta es la excusa perfecta para que la ciudad más tranquila y conservadora de España, se transforme, durante siete días, en un antro de desmadre, sobrepoblada de extranjeros, que ni idea tienen de las raíces históricas de esta fiesta y sólo ven en ella la excusa para carretear, emborracharte y correr como hueones delante de unos toros de lidia maravillosos. Culpable de esta invasión de "guiris", gringos y australianos en su mayorís, dicen que es el inolvidable Ernest Hemingway, un amante de los sanfermines, que los hizo conocidos en todo el mundo por su novela La Fiesta.




Lo más conocido de esta fiesta es el encierro. Pude presenciar, desde la plaza de toros, cómo los toros, en su traslado desde los corrales a la plaza, deben enfrentarse en el camino con unos hueones de blanco y rojo que corren delante y detrás de ellos. Algo peligrosísimo y por eso muchos terminan heridos. Los toros llegan a la plaza y son encerrados nuevamente (pobres, no saben lo que les espera). Luego, para "entretener" a los corredores que han sobrevivido a este "encierro" (que son la mayoría, por cierto, de unos 50 corredores, un promedio de dos o tres son coneados y no siepre hay heridos graves), tiran al ruedo a unas pobres vaquillas, que son molestadas por los corredores, con pésimas consecuencias para ellos. Presenciar eso desde la plaza de toros es como volver a la época de los romanos, cuando a los cristianos los tiraban a los leones.




Hay que aclarar, que existen dos tipos de personas que corren en los encierros: atletas, que se preparan para ello, igual que cualquier deportista para una competición, que se levantan tempranito para ir a correr a las 8 am, y borrachos, alentados por los litros de cerveza y kalimotxo (jote), que pasan de largo carreteando hasta la hora del encierro. Obviamente, los más perjudicados generalmente son los segundos.




Lo que ocurre con esos toros por la tarde, y que es la razón por la cual cada año hay protestas que piden acabar con esta tradición, es algo que yo me negué a ver. Como chilena, no estoy acostumbrada a las corridas de toro, ya que desde la primera mitad del siglo XIX, están prohibidas. Por lo que yo no veo mucha gracia en presenciar el espectáculo que hace un hombre, generalmente muy guapo, vestido con un traje dieciochesco, cuyo objetivo final es matar a uno de esos pobres toros que corrieron el encierro por la mañana.Y como sanfermines dura siete días, son siete corridas de toros, donde las víctimas son seis toros diarios. Yo no soy vegetariana ni lo más ecologista del mundo, pero me parece una crueldad presenciar la matanza de un animal como espectáculo.






Talvez los amantes del mundo taurino me odien por lo que dije, pero me da lo mismo. Lo cierto es que me dan pena las corridas de toro. Alguien puede decirme: ¿Y no te da pena los heridos en los encierros? Si, pero menos, no porque sea la gran defensora de los animales, sino porque ellos han decidido libremente correr delante del toro. Nada más que decir.






Pamplona en Sanfermines se transforma: de ser una ciudad tranquilita, pasa por siete días a convertirse en un desmadre total, donde la gente usa las plazas y esquinas no sólo para juntarse a carretear, sino también de hotel y baño. Eso hace que la ciudad, normalmente limpia, sea un asco. De hecho, ir a la plaza del castillo, experiencia agradable el resto del año, porque es un lugar limpio y precioso, para los que somos hipersensibles a los olores puede convertirse en una experiencia vomitiva.






Por suerte, en sanfermines no todo son toros y kalimotxos. También hay actividades más familiares, como ferias, juegos, bailes y música regional, desfiles, procesiones y fuegos artificiales. Todo muy bonito. Si uno quiere vivir los sanfermines como corresponde, hay que vivir un poco de las dos cosas. Digo yo, para hacerse una idea completa de lo que es. Porque es mucho más que los dos minutos que dura cada encierro, que es lo que normalmente muestran por la tele. Una fiesta donde, por una semana, guiris y pamplonicas celebran, vestidos de blanco y con "pañuelico" rojo a San Fermín...¿personaje histórico o leyenda? En estos días es lo que menos importa.

12 comentarios:

castillosenlasnubes dijo...

odio esa cosa!

Kuky Haindl dijo...

q cosa??? la matanza de toros? yo igual

Anónimo dijo...

que entrenido igual, aunque es cierto que es medio cruel eso de la matanza de los toros.
Harto asqueroso eso de que usen las calles como baño, vivi la experiencia en los carnavales de Tolosa, y al día siguiente es bien penca eso de los olores.
En fin, saludos y suerte kuki!

Anónimo dijo...

Ahh y sí, es cierto, estuve hospitalizada, nada grave, ya estoy casi cien po ciento recuperada, lo malo es que perdí casi todas mis vacaciones de invierno recuperandome jajaja.

Marsu dijo...

Permiso Kuki,, creo que es mi primera visita por acá..
Y es que te leí y no pude dejar de comentar, porque me parece una estupidez extrema esto de la matanza.. Y pienso que quienes son corneados se lo buscan.. De nuevo, una estupidez con cuernos.
Cariños de parte de otra hermitaña.

Niña Incógnita dijo...

Que buen post, hace tiempo que quería saber del origen de esto, y no tenía idea.
De chica vi por televisión, un grupo de hombres corriendo y arriesgando su vida con estos toros, y siempre he pensado que deberían modificar la fiesta, me perdonaran a quienes les guste, pero creo que no vale la pena arriesgar la vida así.
Y peor aún me parece disfrutar con el sufrimiento de los toros, verlos correr sangrando... no me parece un lindo espectáculo, y no es que sea muy amiga de los animales, es que simplemente matar a los toros porque si, no es algo muy digno.

Con tu relato, me pareció estar ahí, observando todo eso.

Un abrazo,

Águila libre dijo...

Hola: interesante, no sabía bien como era todo, sólo lo que muestran en la tele acá y tu sabes que no es mucho.

Para mi, los que corren delante de los toros son bien poco inteligentes y no me dan pena, simplemente porque ellos saben a lo que van.

Si y es algo que nunca he soportado es cuando el torero va enterrando sus espadas en el toro y lo va desangrando de a poco. Ni de las épocas de las cavernas.

Esta bien matar a un animal para comer, pero de un viaje y sin dolor, pero eso, de a poco y por diversión me da verguenza de la raza humana.

Espero que estes mejor.

Mil cariños,

Pay

C. dijo...

que entretenida debe ser esa celebracion. peligrosita eso si. esperaria a estar en bastante mejor condicion fisica para ir, q a pesar de q hago ejercicio habitualmente, me siento un poco debil aun, jojo.

y si me hablas de ferias y variedades, mejor aun. me encantan todas esas celebraciones "a lo pueblo". seran estilo semana costumbrista del sur de la larga y angosta faja?? (pucha q se come rico en las semanitas del sure jejeje)

besotes!

Linda Carmona dijo...

Tiene su toque interesante y su toque repulsivo... cómo todo en la vida, no? mmmmm pero ha de ser una experiencia única ver a esos locos corriendo delante de una manada de mamiferos que en cualquier momento uno de los dos puede salir dañado.
Y como bien dices la gracia está en disfrutar de todo un poco, aunque no siempre tu forma de disfrutar de las cosas de la vida sera masivo...!!

Ahhhhh y prometo escribir este fin de semana, por fin se acaba este semestre y tengo algunas cosas que decir.. me siento ahogada jajajjajajajaja....
Saludos desde el Desierto... Olé (ah no... esto no se dice acá)

Gabriel dijo...

Pamplona que envidiaaaaaaaaa kUKii yo quiero quiero quiero quiero ...toros, vino, mujeres y descenfrenoo...viva pamplona y viva la KuKi...
TE envidio
Un besote desde la distancia

Unknown dijo...

no se si es del todo repudiable, son tradiciones como el rodeo, las ramadas y tanta wea que hay en el mundo... no se si repudiarlo... aunque no me gusta tampoco eso de la matanza me parece interesante conocer otro tipo de tradiciones...

debo confesar que ni cagando corro delante de un toro, pero lo quetu cuentas debe ser divertido, todo el carrete que rodea san fermin...

nota aparte la deniminacion del jote... kalimotxos???... jajajaja yo prefiero "licor de ave"

un abrazo kuki, cuidate mucho.

Alvaro en OZ dijo...

amigos que viven en españa siempreme cuentan q el pueblo es de los mas aburrido que existe, exceto para san fermín donde todos se descuadran y se vuelven locos con el jolgorio
que bueno q estuviste ahí, debe ser una experiencia única, a pesar de que el tema del toreo no es santo de mi devoción y lo encuentro un tanto cruel

saludos ¡¡¡