sábado, agosto 18, 2012

Y tú...¿qué te crees?

Lo digo en serio...¿qué te crees para andar por la vida con esas ínfulas de rey, de ser superior y exitoso, mirando a todos por encima del hombro? ¿Quién te hizo juez de lo que es correcto, de decidir quién es mejor que otro? Humillando, haciendo comparaciones odiosas, siempre buscas quedar bien, hundiendo a los demás...¿quién te crees que eres? ¡¿Hasta cuándo?!
Sol@, te vas a quedar sol@, porque ya nadie más soporta estar a tu lado. No importa todo lo que te esfuerces. El cariño uno se lo gana dando cariño. No sacas nada con ser tan generos@, si después de un acto amable, vienen cien palabras de crítica. Talvez, a veces, una crítica tuya haga bien. Porque las verdades duelen, pero es necesario escucharlas. El problema es que acá no hay reciprocidad. Tú puedes estar un día entero diciéndole a la gente las "verdades", sacándole en cara sus defectos, limitaciones o debilidades. Pero, a la larga, eso cansa. Y si uno trata de decirte algo, si alguien intenta decirte lo mismo a tí, incluso usando un tono menos agresivo y burlesco al que usas tú...te engrifas, insultas y aumentas tus descalificaciones hasta el infininito.
Por eso digo, ¿qué te crees tanto? ¿O acaso eres el primer ser humano de esta era creado con infinitas perfecciones? Y si así lo fueras, tendrías tolerancia y filtro. Medirías lo que dices, o al menos, lo dirías una vez, sin estar constamente repitiéndole a la gente sus defectos. Eso a la larga cansa, cansa mucho. Y siendo que puedes ser una persona muy buena, lo echas a perder con esa actitud. ¡Qué pena!

(Dedicado a aquellos cuyo ego es tan grande, que no son capaces de ver la viga en sus ojos, pero que son expertos en ver la paja en el ojo ajeno)