jueves, mayo 14, 2009

Doctor House

Una verdadera adicción es para mí esta serie. La primera vez que la ví fue mientras vivía en España, y desde el principio me enganchó. La daban en la Cuatro, los días martes, doblada. Primero el capítulo de estreno y luego tres capítulos de temporadas anteriores. Ahí comenzaron mis desvelos por Gregory House. Mi mamá la veía desde antes y ya me la había recomendado, pero nunca pude verla hasta principios del 2007.
No sé nada de Medicina y por lo tanto, no sé si lo que muestran son chamullos, exageraciones o si en realidad existen enfermedades tan raras o complicaciones tan insólitas. Lo cierto es que tienen una forma de presentar los casos, la investigación y los tratamientos que implican, muy entretenida. Y lo mejor, claro está, es la retorcida personalidad de su protagonista.
Brillante, loco, amargado, drogadicto, enfermo, neurótico, insensible, desconfiado y ateo. Así es House. Hay muchas explicaciones acerca de su extraña forma de ser: su enfermedad, su relación con su padre, su divorcio...de hecho, yo soy una de las reacias a que House se empareje: no me gustó nada cuando salió con Cameron o cuando estuvo a punto de volver con su ex. Le quitan la "esencia" al personaje. Distinto es su eterno coqueteo con su jefa...que en un capítulo de esta quinta temporada se concretó en un beso...que después quedó en nada.
En un mundo donde las diplomacias y lo "políticamente correcto" está a la orden del día, aparece este personaje, que por el hecho de ser una eminencia en diagnóstico médico, se cree con el derecho de hacer lo que quiera y tratar a la gente como se le da la gana. Gozo con sus sarcasmos y su crueldad para tratar a la gente...por suerte no es real. Yo creo que a nadie le gustaría ser tratado así por su doctor. Pero como es ficción, no hay problemas.

6 comentarios:

Anaís Sandiego dijo...

House es uno de mis amores platónicos (aunque sé que no lo aguantaría ni 15 minutos si existiera de verdad). Me encanta él y sus locuras y su forma de ver la vida.

Muy buena serie, pero lejos este actor s elleva todos los honores.

Saludos

Anaís S.

Memoriona dijo...

Yo también la veía en la Cuatro, me quedaba hasta tarde viendo tele, pero me empezo a molestar el hecho de que por cualquier cosa había que abrirle la cabeza al paciente.
A mi me gustaría un doc así de pesao! ahahahaha

Ahora que me voy a quedar guachita de Grey's creo que vere House.

escorpiona dijo...

Hace rato que no sigo una serie, voy a ver si la consigo en el cable :) :)...

Saludos

Chau

Alvaro en OZ dijo...

a veces pienso que quiero ser como House cuando grande. he seguido la última temporada (en inglés) y ha habido bastantes cambios en las relaciones entre los personajes (hay un personaje menos!!). el miércoles dan el último capítulo de la temporada y espero que no se me olvide verlo. y no contaré ningún spoiler !!
saludos !!

Isabel Barceló Chico dijo...

Cierto, no hay problemas porque es ficción. Es un personaje realmente irritante, y si los pacientes no estuvieran muriéndose,seguro que se levantarían de la cama para darle un par de tortas. Con todo, hay que ver cómo entusiasma a sus seguidores... Estoy de acuerdo contigo en que lo mejor es que no se enamore de nadie, eso lo ablandaría. Saludos cordiales.

Unknown dijo...

yo que trabajo en un ambiente médico soy bien fijón en estas series como Dr. House o ER... mi polola siempre me guevea porque le ando buscando el error en las cosas...

Pero Dr. House es increible... el sarcasmo y el pasarse por la raja lo politicamente correcto es un: "como me gustaría hacer lo mismo".

En pocas palabras... Gregory House es un conchesumadre... pero como me gustaría ser como el... jajajaja

Un abrazo.